El capitán del avión de Ethiopian Airlines que se estrelló hace casi una semana pidió permiso “con voz de pánico” para regresar al aeropuerto poco después del despegue, informó el viernes The New York Times, mientras la aerolínea dijo que había comenzado la investigación sobre las grabadoras de vuelo.
El diario citó a “una persona que revisó las comunicaciones de tráfico aéreo” del vuelo del domingo, diciendo que los controladores notaron que el avión se movía cientos de metros hacia arriba y hacia abajo, con una velocidad que parecía inusualmente rápida.
Un portavoz de la aerolínea ha dicho que al piloto se le dio permiso para regresar, pero el avión se estrelló minutos más tarde en las afueras de Adís Abeba, matando a las 157 personas a bordo.
Las autoridades francesas disponen ahora de los datos de vuelo y de las grabadoras de voz del avión para su análisis. La agencia a cargo de la revisión dijo que no estaba claro si se podían recuperar los datos, y tuiteó una foto del grabador de datos que parecía mostrar daños. Ethiopian Airlines dijo que una delegación etíope encabezada por su jefe de investigación de accidentes había llegado allí.
En Etiopía, los funcionarios comenzaron a tomar muestras de ADN de los familiares de las víctimas para ayudar a identificar los restos.
Países como Estados Unidos han ordenado que permanezcan en tierra todos sus aviones Boeing 737 Max 8, mientras la empresa norteamericana se enfrenta al desafío de probar que sus aviones son seguros, en medio de sospechas de que un software defectuoso podría haber contribuido a este y otro desplome que causaron la muerte de 346 personas en menos de seis meses.