El incidente ha “interferido gravemente en la actividad habitual de los ejercicios” e “incurrió gravemente en el riesgo de un juicio erróneo e incluso provocar un incidente mar-aire no intencionado”, explicó el Ministerio de Defensa Nacional el martes en la noche.
“Este fue un acto directo de provocación”, añadió el ministerio citando a su vocero, Wu Qian. China ha presentado una queja firme y pidió que Estados Unidos cese ese tipo de acciones, apuntó Wu.
El comunicado no ofreció detalles sobre la hora y el lugar en el que se realizaron las maniobras, pero la información coincide con los ejercicios que la Administración de Seguridad Marítima dijo que comenzaron el lunes y que se prolongarán hasta el 30 de septiembre en el Mar de Bohai, al este de Beijing.
La relación entre Estados Unidos y China está en su peor momento en décadas por las innumerables disputas entre Beijing y Washington, incluyendo el comercio, la tecnología, Taiwán y el Mar de la China Meridional.
Los aviones de reconocimiento de gran altitud U-2 sobrevolaron China, la antigua Unión Soviética y otros países del bloque comunista durante la Guerra Fría, y versiones mejoradas del aparato siguen respaldando las misiones estadounidenses.