Volodymyr Zelenskiy ha sido comediante desde hace más de 20 años en Ucrania, a veces imitando a políticos en sus monólogos humorísticos. Así que cuando su compañía de producción necesitaba a un actor para hacer el papel de un ciudadano común y corriente que de pronto se convierte en presidente, Zelenskiy fue la opción natural.
Pero como ejemplo de que la vida imita al arte mucho más que lo contrario, la estrella de cine y televisión de 41 años que interpreta al mandatario en una popular serie televisiva es el candidato favorito a la presidencia de Ucrania. Es un papel que Zelenskiy toma en serio.
“Hay corrupción por todas partes. Necesitamos reducir sus efectos en el gobierno, en la vida de las personas”,
dijo el candidato durante una entrevista con The Associated Press en la que delineó sus planes para frenar un éxodo de ucranianos subiendo los salarios e instalando internet en aldeas remotas.
Zelenskiy argumenta que su falta de experiencia política es una ventaja en un ambiente electoral donde las esperanzas de los votantes por un mejor futuro han sido frustradas. El candidato se describe como una “nueva cara” y dice que su participación en la contienda presidencial inyectó un poco de “emoción” a la política ucraniana. También desestimó los argumentos que indican que él está controlado por un banquero poderoso liado en un tira y afloja con el presidente actual, Petro Poroshenko.
En sus monólogos humorísticos, Zelenskiy frecuentemente se burla del presidente actual. La mordaz sátira ha promovido su popularidad e irritado al presidente, quien se quejó con el comediante diciéndole que sus bromas eran injustas, de acuerdo con Zelenskiy.