Cada niño reacciona de diferente manera ante las dificultades, incluyendo la forma de expresar las emociones, en algunas culturas no es aceptado llorar en público, mientras que en otras sí.
Algunas señales de estrés no son evidentes, los niños y adolescentes, suelen observar de manera atenta las reacciones de los adultos esto para aprender a gestionar sus propias emociones.
Las reacciones más comunes entre los niños según la edad:
0-3 años
- Mayor necesidad de estar cerca de los cuidadores.
- Rabietas más frecuentes.
- Regresión del compotamiento.
- Aumento de irritabilidad.
- Llantos más frecuentes.
- Temores intensos.
4-6 años
- Necesidad de estar cerca de los adultos.
- Dificultad para concentrarse.
- Disminución o exceso de actividad.
- Pérdida de interés por el juego.
- Deseo de asumir papeles de adulto.
- Ansiedad.
7-12 años
- Cambios en los patrones de alimentación o del sueño.
- Agesividad.
- Agitación.
- Deterioro de la memoria y de la concentración.
- Síntomas físicos/psicosomáticos.
- Sentimiento de culpa.
13-17 años
- Tristeza intensa
- Sentimiento de vergüenza y culpa.
- Mayor cuestionamiento de autoridad.
- Agresividad.
- Comportamiento autodestructivo.
- Sensación de desesperanza.

Todas las edades reacciones físicas:
- Fatiga
- Sensación de opresión en el pecho.
- Boca seca.
- Debilidad muscular.
- Dolor de estómago.
- Mareos.
- Dolor de cabeza.
Señales de alerta preocupante, que no se deben pasar por alto:
Constante dolor de cabeza, miedo, agresividad, voluntad de dañar a otros, confusión desorientación.