Luego que se diera a conocer sobre la varios loros muertos localizados a la orilla de la carretera en la Ruta Al Atlántico, específicamente en la aldea Juan de Paz del municipio de Los Amates en el departamento de Izabal, el Ministerio Público solicitó al Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), identificara a qué especie pertenecían las aves.
Según el informe, se contabilizaron un total de 18 pichones que pertenecen a la especie de Loro Cachetes Amarillos (Amazona autumnalis), que se encuentran en el Listado de Especies Amenazadas de Guatemala, Categoría 3. De acuerdo a los indicios estos fueron extraídos de sus nidos para luego comercializarlos de forma ilegal, al momento de la evaluación se determinó que las especies silvestres fallecieron por asfixia.
En los meses de febrero a mayo se da la reproducción de los loros y pericas, lamentablemente también es la temporada de mayor saqueo de pichones de sus nidos, agregando otras amenazas como destrucción de hábitat y tráfico o venta ilegal, avance de la frontera agrícola, incendios forestales, tala ilegal, entre otros.
Los animales silvestres no son mascotas y llevarlos a casa ocasiona la reducción de las poblaciones, tristemente 8 de cada 10 loros o pericos mueren en el tráfico ilegal antes de llegar a un comprador.
El CONAP insta a la población a denunciar todo acto ilícito que atente contra el patrimonio natural de la nación y reitera que el tráfico de vida silvestre es un delito penado por la Ley de Áreas Protegidas.