Con sus dos máximas competencias continentales en marcha, el fútbol sudamericano ya incurrió en viejas mañas.
Seis clubes de Chile fueron sancionados por la Conmebol con multas económicas de 15.000 dólares cada uno por incumplir el plazo para la presentación de la lista de jugadores en la Copa Libertadores y en la Sudamericana.
Otros 15 equipos de Brasil, Paraguay y Venezuela aguardan por el dictamen del tribunal de disciplina de la entidad por la misma razón, mientras que Barcelona de Ecuador quedó eliminado en la fase preliminar de la Libertadores por inclusión indebida de un jugador.
El prestigio de la Conmebol se vio dañado en 2018 con las irregularidades que afectaron el normal desarrollo de las competencias que están bajo su ala y que tuvieron como corolario la mudanza de la final inédita de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors a Madrid.
La Conmebol no tenía debidamente registrados en su sistema las suspensiones a jugadores por acumulación de amarillas y rojas de vieja data, lo cual motivó que varios equipos cometieran la alineación indebida de futbolistas.
Algunos clubes con buenos abogados advirtieron la anomalía a tiempo, reclamaron ante el tribunal de disciplina y lograron que la Conmebol les diera por ganada la partida en los despachos de Asunción y no en la cancha.