Recientemente el volcán Pacaya encendió las alertas ante su creciente actividad. Según William Chigna, de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) este coloso se caracteriza por expulsar lava y mezclarse con columnas de ceniza, misma que puede llegar a afectar la visibilidad al ser intensa.
A este tipo de volcanes se les clasifica como estromboniano y aunque no se caracteriza por los lahares, la expulsión de lava puede llegar a dañar a quienes se encuentren muy cerca del cono volcánico, ya que la lava se enfría generando rocas que caen a gran velocidad.
El segundo de los volcanes activos es el Volcán de Fuego y este es clasificado de tipo vulcaniano, caracterizándose por lanzar columnas de ceniza y lava pero principalmente por arrojar flujos piroclásticos y lahares; mismos que descienden por las diferentes barrancas a una velocidad de 150 kilómetros por hora a una temperatura que puede variar entre los 400 a los 600 grados. Al momento de respirarlo puede quemar de inmediato las vías respiratorias, el efecto devastador aún se ve reflejado en San Miguel los Lotes, Escuintla.
El Volcán Santiaguito a diferencia de los dos anteriores no presenta fusión de lava, pero si emana columnas de ceniza, flujos piroclásticos y lahares, este se desarrolla en una actividad mediana.
Mientras que el Volcán Tacaná que es un estratovolcán activo, tuvo su última erupción registrada en mayo de 1986. Fue precisamente esta última, la que dio origen a un pequeño cráter a 3600 metros de altura sobre el nivel del mar en el noroeste del accidente geográfico. Esa fisura actualmente emana vapor.
Se reactiva el Volcán de Pacaya con fuerte erupción y lanzamiento de ceniza
Catorce albergues han sido habilitados en caso de emergencia por incremento de actividad en volcán Pacaya