Tres republicanos más de la Cámara de Representantes recibieron peticiones el lunes para voluntariamente comparecer ante la comisión legislativa que investiga la insurrección del Capitolio de Estados Unidos y responder preguntas sobre su participación en el intento de anular la pérdida electoral de 2020 de Donald Trump.
La comisión envió cartas a los representantes del Partido Republicano Mo Brooks de Alabama, Andy Biggs de Arizona y Ronny Jackson de Texas. Los tres son miembros de un bloque legislativo de derecha llamado “Freedom Caucus” que en años recientes se han alineado con Trump.
El panel de nueve miembros solicita a los miembros del Congreso testificar sobre su participación en reuniones en la Casa Blanca, conversaciones directas con el entonces presidente Trump mientras intentaba impugnar su pérdida y la planeación y coordinación de eventos antes y durante el 6 de enero de 2021.
“La Comisión Selecta se enteró que varios de nuestros colegas tienen información relevante a nuestra investigación sobre los hechos, circunstancias y causas del 6 de enero”, dijo el presidente de la comisión Bennie Thompson, un demócrata, y la vicepresidenta Liz Cheney, una republicana. “Exhortamos a nuestros colegas a unirse a los cientos de individuos que han compartido información con la Comisión Selecta para llegar al fondo de lo que sucedió el 6 de enero”.
La decisión de pedir la cooperación de Brooks se tomó semanas después de que el republicano de Alabama acusara a Trump de dejar de apoyarlo en su campaña senatorial en represalia por rechazar la súplica del expresidente de ayudarlo a anular la elección del 2020.
Brooks, quien habló en el evento el día antes de que los partidarios de Trump irrumpieron en el Capitolio, desde entonces se ha vuelto más crítico del expresidente y la comisión considera que su conocimiento sobre el intento de Trump de involucrar a miembros del Congreso será útil para su investigación.
El interés de la comisión en Biggs se dio luego de un documento presentado ante la corte el 22 de abril en que legisladores lo acusan de ser un participante activo de reuniones en la Casa Blanca después de la elección del 2020, en las cuales él y otros republicanos compartieron ideas para mantener a Trump en el poder. Biggs también está acusado de motivar a manifestantes a ir a Washington el 6 de enero, así como de persuadir a legisladores y funcionarios estatales de que la elección fue robada.
El panel también quiere interrogar a Jackson sobre sus intentos, junto con otros legisladores del Partido Republicano, de bloquear las puertas de la Cámara de Representantes mientras los agitadores intentaban entrar.