Una segunda réplica fuerte de un sismo de magnitud 4,0 azotó el norte de Nueva Jersey, y numerosas personas lo sintieron en toda la ciudad de Nueva York y sus alrededores en Nueva Jersey.
Sismo en el noreste de EE.UU. sin daños insignificantes
El sismo de magnitud 4.7 que sacudió este viernes 5 de abril el noreste de Estados Unidos ha dejado pocos daños y ningún herido, pese a ser uno de los mayores movimientos telúricos en esta zona en el último siglo, según la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul.
Aunque el epicentro del sismo fue en Lebanon, Nueva Jersey, todos los ojos se pusieron en la ciudad de Nueva York, donde se sintió durante unos segundos a las 10:23 hora local (14:23 GMT) en la totalidad de la Gran Manzana y algunos residentes acudieron a las redes sociales para preguntarse qué había pasado.
“Se trata de uno de los mayores terremotos que se han producido en esta costa en el último siglo”, dijo en una conferencia de prensa Hochul, que destacó que su estado no está acostumbrado a los sismos.
Los aeropuertos fueron afectados
Los aeropuertos internacionales John F. Kennedy (Nueva York) y Newark Liberty (Nueva Jersey) cerraron este viernes 5 de abril de 2024, tras el sismo para asegurarse de que no ha habido daños.
Por su parte, el aeropuerto de LaGuardia, también en Nueva York, siguió con su tráfico, ya que, según las autoridades, está mejor preparado para este tipo de fenómenos.
Según la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés), el sismo también afectó a algunas instalaciones de tráfico aéreo en Filadelfia y Baltimore
Posibles réplicas
En la costa noreste sigue la alerta por la posibilidad de más réplicas, como la que se dio una hora después en Bedminster, Nueva Jersey, con una magnitud de 2,0.
Nueva York incluso mandó una alerta móvil a sus residentes advirtiendo de esta posibilidad y dando consejos como ponerse debajo de una mesa, si uno está en el interior, o alejarse de los edificios y postes eléctricos, si está en el exterior.
El alcalde Adams dijo que, pese a que podrían ocurrir réplicas, “los neoyorquinos deberían seguir con su día normal”.