Una fuerte tormenta invernal provocó el miércoles la cancelación de más de 1.000 vuelos en Denver y el cierre de carreteras interestatales en lugares del oeste y en la región centro norte de Estados Unidos.
La tormenta provocó nevadas en algunas partes de los estados de Colorado, Wyoming, Montana, Nebraska y Dakota del Sur.
Se emitieron alertas por tormenta en Dakota del Norte y en el noroeste de Minnesota, donde se pronostica que la tormenta empiece a afectar el jueves.
La nevada podría competir con otra que azotó la región en 1979 en términos de la magnitud, de acuerdo con el meteorólogo Richard Emanuel del Servicio Nacional de Meteorología en Cheyenne, donde las ráfagas de viento eran de 96 kilómetros por hora con una fuerte caída de nieve.
Los aviones no pudieron despegar en Denver, Casper y Cheyenne. Las clases fueron suspendidas en varios sitios donde se registraron más de 30 centímetros de nieve y existía la posibilidad de tener ráfagas de viento de hasta 129 km/h).
Los trabajadores gubernamentales de Denver, Wyoming y Dakota del Sur recibieron instrucciones de quedarse en casa y muchas universidades cerraron sus instalaciones.
Cientos de kilómetros de una autopista y de carreteras más pequeñas fueron cerrados en Wyoming y en el oeste de Nebraska debido a las malas condiciones climáticas.