Se esperaba que la nueva tormenta se moviera por el norte de California el miércoles por la noche, seguida de múltiples rondas de precipitaciones para el resto de la semana y hasta la próxima semana, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
La primera tormenta de la semana llegó el lunes por la noche con vientos, nieve torrencial y lluvias torrenciales mientras se extendía hacia el sur.
Para la madrugada del miércoles, el extremo de la tormenta prácticamente había salido del sur de California, donde se pronosticaba otra gran tormenta para el sábado y domingo.
El pronóstico de largo plazo para el sur de California indica que el Desfile de las Rosas número 138 de Pasadena esquivará por poco el clima tormentoso gracias a su tradición de realizar el evento el 2 de enero si el Año Nuevo cae en domingo. La lluvia volverá a mediados de semana, dijeron los meteorólogos.
Los datos del Departamento Estatal de Recursos Hídricos muestran que la capa de nieve de las montañas de California, un tercio del suministro de agua del estado, ha tenido un buen comienzo. Pero los expertos siguen siendo cautelosos. El invierno pasado tuvo un comienzo similar y luego se volvió extraordinariamente seco de enero a marzo.