El animal supuestamente se avalanzó sobre padre e hija, cuando se acercaron demasiado a la jaula para acariciar a uno de sus cachorros. La leona, aún en edad joven, le arrancó el cuero cabelludo a la niña, Dina-Marie de Beer, y le hundió una garra en el cráneo.
El padre, identificado simplemente como Pieter, sólo recibió heridas leves, pero la menor tendrá que afrontar una lenta recuperación. El lunes la pequeña fue sometida una cirugía en la que fue preciso retirarle parte del cráneo para aliviar la presión en el cerebro.
Pieter y Dina-Marie de Beer no son los primeros visitantes de Weltevrede atacados por sus animales. Según precisa el medio, un suceso similar tuvo lugar hace apenas una semana, cuando un hombre resultó herido al sufrir un ataque de otro león de la granja. Un incidente parecido ocurrió en 2010, cuando dos hermanas sufrieron mordeduras de estos felinos.
“A veces [los leones] juegan un poco rudo”, dijo al medio el dueño de la instalación, Nico Roets, para explicar que se trata de animales peligrosos y salvajes.