Más de 100 hondureños, miembros de la nueva caravana migrante que atraviesa Guatemala para llegar a Estados Unidos, fueron recibidos el miércoles en la Casa del Migrante, en la zona 1 capitalina.
El grupo está conformado por 54 adultos (hombres y mujeres), además de 48 niños y adolescentes, de acuerdo con los registros del centro.
Muchos prefieren callar y no realizar comentarios sobre su deseo de migrar; sin embargo, otros, con más valor, cuentan detalles del recorrido.
Ese es el caso de un adolescente de 18 años, quien dejó su vida en Honduras para unirse a un pequeño grupo de diez amigos con quienes emprendió el viaje.
Los jóvenes se unieron a la caravana sin avisar y hasta este jueves pudieron comunicarse con su familia.
Que me portara bien… y varias cosas me dijo”, expresó el muchacho, al recordar la conversación que tuvo con su madre, quien le pidió que se cuidara.
Este migrante cuenta que se graduó de Mercadotecnia pero que no hay campo y decidió hacer el viaje porque no hay empleo.
“Metí papeles en varias maquilas y nada, nunca me llamaron”, relató.
Atención Integral
Como en otras ocasiones, el padre Mauro Verzeletti indicó que todo el equipo trabaja para dar una atención integral a las personas que lleguen al país.
Sabemos que migrar es un derecho y estamos respetando ese derecho humano; y queremos dar una buena demostración a la soc en el tema de la acogida y hospitalidad, que es muy importante que las personas se sientan recibidas en Guatemala de manera integral“, dijo.
Las personas que llegaron ayer ya recibieron toda la ayuda humanitaria y se habilitó un terreno frente a Casa del Migrante para tener más espacio y mejor atención a las personas, -es un terreno para que se use de forma integral en estos días de emergencia que estamos viviendo en Guatemala, a causa de las caravanas que están llegando-, indicó.
Afinan detalles
El terreno del que habla el padre Verzeletti tiene una extensiión de mil 300 metros cuadrados en el que se instalarán toldos y electricidad, y que cuenta con capacidad para recibir a un grupo aproximado de 800 hondureños que se encuentran en Esquipulas y que llegarán en las próximas horas.
Solo quedan algunos detalles como la limpieza total del terreno que se realizará en el transcurso de la mañana. El director del centro hizo un llamado a la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) y al Ministerio de Salud para que apoyen en la emergencia.