Ochoa y Puerta se encargaron del cuidado de la víctima durante el cautiverio; mientras que Molina hizo las llamadas a la familia para exigir el pago por el rescate de la secuestrada.
De acuerdo a las investigaciones, Germán Loera, quien en redes sociales ofrecía servicios como conferencista en temas de desarrollo empresarial, era “el líder de la banda criminal”.
El conocido ‘youtuber’ “rentó la casa donde tuvieron a la víctima y exigió el pago del rescate por la cantidad de dos millones de dólares en conversión a la criptomoneda bitcóin”, dice la Fiscalía en su texto.
Unos días después del secuestro, el 2 de marzo, policías de la Unidad Antisecuestros lograron rescatar a la víctima y detener a cuatro de los delincuentes. Ese mismo día detuvieron a un quinto implicado y el 6 de marzo fue aprehendido el último delincuente en participar.
Además de la condena de prisión, a los integrantes de esta banda se les ordenó el pago de 500.000 pesos (26.000 dólares) en concepto de reparación de daños.