El vicepresidente Mike Pence se negó a apoyar los esfuerzos para invocar la Enmienda 25 para destituir al presidente Trump en una carta que le escribió a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
“Pero ahora, con sólo ocho días para el final del mandato del presidente, usted y la bancada demócrata están exigiendo que el Gabinete y yo invoquemos la Enmienda 25. No creo que ese curso de acción sea en el mejor interés de nuestra Nación o sea consistente con nuestra Constitución”, escribió Pence.
También señaló que no “Cedió a la presión política para ejercer presión más allá de mi autoridad constitucional para determinar el resultado de las elecciones, y ahora no cederé a los esfuerzos en la Cámara de Representantes para jugar juegos políticos en un momento tan serio en la vida de nuestra Nación”.
Pence también escribió que invocar la Enmienda 25 “De esa manera sentaría un precedente terrible”.
Po lo que instó a Pelosi ya todos los miembros del Congreso a “bajar la temperatura y unir a nuestro país mientras nos preparamos para tomar posesión del presidente electo Joe Biden”.
El vicegobernante se comprometió a trabajar de buena fe “Para garantizar una transición ordenada del poder”.
¿Qué es la 25ª Enmienda?
La 25ª Enmienda, que periódicamente se ha considerado como un último recurso para destituir a un presidente rebelde o incapacitado.
Algunos miembros del gabinete sostuvieron discusiones preliminares sobre la invocación de la 25ª Enmienda para forzar la destitución de Trump, dijo una fuente republicana.
¿Por qué existe la 25ª Enmienda?
La 25ª Enmienda fue promulgada a raíz del asesinato de John F. Kennedy, cuyo predecesor Dwight Eisenhower sufrió importantes ataques cardíacos. Estaba destinada a crear una línea clara de sucesión y como preparación ante contingencias urgentes.
Eisenhower sufrió un ataque cardíaco que lo debilitó mientras estaba en el cargo en la década de 1950. Eso fue antes de la 25ª Enmienda, por lo que no había una norma constitucional. En cambio, llegó a un acuerdo con el vicepresidente Richard Nixon sobre la entrega del poder.
La parte de la 25ª Enmienda que permite al vicepresidente y al gabinete destituir al presidente tenía en mente a un líder que estuviera en coma o sufriera un derrame cerebral.
La administración de Reagan redactó, pero no firmó ni transmitió, cartas al Senado que le habrían quitado el poder a Ronald Reagan después de que le dispararan en 1981.
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