El hecho ocurrió el 13 de mayo del 2017, el agente de la Policía citó a su ex conviviente para hablar de la pensión alimenticia de su hijo menor, ordenada por un juzgado de familia. Ella llegó al lugar donde la citó y al salir de esa cita, ella llegó a la subestación de policía en Santa Lucía Cotzumalguapa, lugar donde ocurrieron los hechos, indicando que se encontró con el ahora condenado y que este la agredió verbalmente e intentó hacerlo de forma física, sin embargo, Margarita, logró defenderse.
En ese encuentro y ataque verbal, el hombre le dijo que iba a matarla con el arma que llevaba consigo y que se quedaría con el hijo de ambos, por quien se habían reunido. Ella denunció que se sentía amenazada y temía por su vida, por lo que pidió medidas de protección.
Marvin Augusto Rosales Calderón es la identidad del hombre que finalmente cumplió su amenaza y horas más tarde, en la mañana del día 14 de mayo del 2017, se encontró el cuerpo sin vida de Margarita flotando en el río Pantaleón, según el informe forense, ella tenía algunas heridas que sugerían que se defendió mientras fue atacada, además, tenía golpes, fracturas y heridas de bala.
Pruebas y sentencia
Según la investigación presentada por la fiscalía en el debate oral y público, se demostró que el ahora sentenciado citó a su ex conviviente y cometió los hechos descritos. Por esa razón, el Tribunal de Sentencia Penal de Delitos de Femicidio y otras Formas de Violencia contra la Mujer del Departamento de Escuintla impuso una pena de 35 años de prisión inconmutables a Marvin Augusto Rosales Calderón, agente de Policía Nacional Civil, por el delito de femicidio.
5 años después de su muerte, la familia de Margarita y Margarita Rubio Sandoval, con el apoyo del Instituto de la Víctima y la investigación del Ministerio Público se logró probar la responsabilidad de Marvin Augusto Rosales Calderón.