Esa cantidad de chapines fallecidos se suma a una cifra alarmante de migrantes que han perdido la vida en América intentando ingresar a otros países.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señala que un total de 514 personas han fallecido en lo que va del año, lo que representa un aumento del 33% respecto al mismo periodo de 2018 en el que se registró una fuerte alza en muertes de migrantes.
Los fallecidos procedían, en su mayoría, de Venezuela, seguida de Haití (59), Guatemala (55) y Honduras (42), según los datos que diariamente se actualizan en el Proyecto Migrantes Desaparecidos de la OIM.
El proyecto de la OIM, iniciado en 2014, nunca había superado la barrera del medio millar de víctimas tan pronto en un año, explicó hoy el portavoz de la organización con sede en Suiza Joel Millman en rueda de prensa.
De los fallecidos hasta el 14 de agosto de 2019 en el continente, al menos 67 eran mujeres y 40 niños, y casi la mitad de las víctimas (247) se reportaron en la frontera entre Estados Unidos y México, frente a 151 en el Caribe, 80 en Centroamérica y 30 en América del Sur.