Una misa de acción de gracias, oficialmente conocida como Te Deum, fue oficiada en la Catedral Metropolitana, tras concluir el acto de toma de posesión.
La misma concelebrada por administrador apostólico de la Arquidiocesis de Santiago de los Caballeros de Guatemala, el obispo Raúl Martínez junto al Cardenal Alvaro Ramazzinni y Monseñor José Cayetano Parra.
Alejandro Giammattei junto a su hija Marcela Giammattei, así como el vicepresidente Guillermo Castillo y su esposa Ana Lisette Arraiga ocuparon asiento en el presbiterio, un lugar privilegiado.
Monseñor Martínez en su homilía, agradeció y pidió a Dios, que guíe y proteja al Presidente de la República, junto al vicepresidente y todo su equipo de trabajo, rogando al creador sea él quien los guié en el camino de servicio que recorrerán durante los próximos cuatro años que durará su mandato.
Dentro del mismo también hizo enfásis en que durante el desarrollo de su gobierno no estará exento de equivocaciones, por lo que siempre es conveniente buscar la guía de Dios y sobre todo rectificar de la mejor manera, si eso llegara a suceder.
El Obispo Martínez, recordó un episodio en donde hace ya varios años, lo observó en actitud de servicio hacía los demás. Para entonces ninguno de los dos se conocía, pero ahora viendo en el pasado, tiene la certeza que esa misma actitud lo será guiando.
El único consejo que emitió, ya que se había prometido no dar ninguno, era pensar en los no nacidos y buscar protegerlos.
Seguidamente se entonó el himno solemne del Te Deum, tocado con el órgano de Catedral, el cual pocas veces resuena entre las paredes del emblemático recinto religioso.
Acto seguido el Cardenal Ramazzini en un breve discurso emitido, le pidió a Giammattei, poner en práctica todo lo ofrecido durante sus discurso de toma de posesión. Finalmente le indicó que cuente con el apoyo de la Conferencia Episcopal y con sus oraciones.