Los presidentes de Perú y Bolivia se reúnieron este martes en la ciudad peruana de Ilo, a orillas del Pacífico, para conversar sobre la posible salida de exportaciones bolivianas desde ese puerto, que a su vez sería el último tramo de un ambicioso proyecto ferroviario que uniría el Atlántico con el Pacífico.
Es la quinta vez que ambos países se reúnen para coordinar temas bilaterales y aunque la temática comercial dominará la agenda, el vicecanciller peruano Jaime Pomareda dijo a la agencia estatal de noticias Andina que también conversarán sobre la limpieza del emblemático lago binacional Titicaca, que se ha convertido en el depósito de las aguas cloacales que emiten las decenas de pueblos asentados en los alrededores y que suman tres millones de personas tanto en Perú como en Bolivia.
El proyecto del tren bioceánico, de unos 3.700 kilómetros y propuesto por China, había sido descartado por Perú en 2016 debido a su elevado costo, pero Bolivia aún está interesada en su impulso. Los empresarios bolivianos cree que el tren ayudaría a mejorar la competitividad de su industria y a movilizar la carga que importa y exporta, la mayoría rumbo al gigante asiático.