El gobernador Gavin Newsom informó que 12 personas murieron como resultado de las violentas condiciones climatológicas durante los últimos 10 días y advirtió que las tormentas de esta semana pueden ser aún más peligrosas. Instó a la población a permanecer en casa.
Las autoridades cerraron escuelas en varios distritos de los condados Sacramento y Sonoma debido a la tormenta. El Distrito Escolar Unificado de Sacramento canceló clases luego que seis escuelas se quedaron sin electricidad. Más de 36.000 clientes permanecían sin servicio eléctrico el lunes por la mañana, una cantidad muy inferior a los más de 350.000 que se vieron afectados el día anterior —cuando ráfagas de 97 km/h (60 mph) derribaron árboles sobre el cableado eléctrico_, de acuerdo con el Distrito Municipal de Servicios Públicos de Sacramento.
Las autoridades del condado Santa Cruz establecieron evacuaciones ante la amenaza de desbordamiento del río San Lorenzo. Por su parte, el condado Santa Clara emitió advertencias de evacuación para varias áreas el domingo por la noche.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre un “desfile implacable de ríos atmosféricos”, tormentas que son largas columnas de humedad que se extienden hacia el Pacífico y son capaces de arrojar cantidades impactantes de lluvia y nieve. La lluvia y la nieve que se esperan para los próximos días se producen después que California de antemano ha sido azotada por tormentas que la semana pasada dejaron sin electricidad a miles de personas, inundaron calles y causaron fuertes oleajes en zonas costeras.
El presidente estadounidense Joe Biden emitió el lunes una declaración de emergencia para California que refuerce la respuesta a las tormentas y las tareas de rescate en más de una docena de condados, entre ellos Sacramento, Santa Cruz y Los Ángeles.