El flujo de migrantes que pasa por Guatemala no se detiene, las personas que dejaron sus países en busca de llegar a Estados Unidos no le temen a las amenazas de Donald Trump ni a las medidas recientemente adoptadas por México, de militarizar la frontera con Guatemala.
Así lo explica el padre Mauro Verzeletti, director de la Casa del Migrante de Guatemala, que advierte consecuencias negativas tras el endurecimiento de las políticas migratorias de México y la región norte de centroamérica, porque las personas no van a dejar de migrar pero se expondrán a situaciones muy peligrosas.
Va a haber secuestros, desapariciones y muertes de migrantes, y México va a ser responsable de esto y no el gobierno norteamericano, porque los gobiernos de México y centroamérica están aceptando de forma pacífica esas medidas impulsadas desde el norte a través de amenazas de recortar recursos económicos que realmente Donald Trump no ha puesto recursos económicos en la región norte de centroamérica o México para que realmente las personas pudieran permanecer en su propio país.”
El tercer país seguro “es inviable”
Verzeletti dijo que Guatemala no puede convertirse en un tercer país seguro, “es inviable porque la situación es compleja, para eso Guatemala necesita más de 15 mil millones de dólares en la región norte de centroamérica para que las personas puedan tener políticas públicas de desarrollo y oportunidades de trabajo y oportunidades para no migrar de forma forzada”, puntualizó.
Esto en relación a lo que dijo el mandatario estadounidense Donald Trump el pasado lunes, cuando indicó que Guatemala se prepara para firmar un acuerdo y convertirse en el tercer país seguro.
Mientras tanto, el fluj0 migratorio sigue al alza, indica Verzeletti, debido a las condiciones de violencia, pobreza y altos índices de desnutrición que aumentan en la región y obligan a las personas a salir de sus hogares. La Casa del Migrante continúa recibiendo entre 50 y 60 personas diarias, destacó.
Descontrol en deportaciones
“EE UU está haciendo un papel sucio con los migrantes”, continúa… “no respeta el debido proceso para los solicitantes de protección internacional y justamente es una situación compleja donde las personas están en hacinamiento, están poniendo a las personas en tipo de campos de concentración que nos recuerda al nazismo, que esto realmente es una situación inhumana violatoria a todos los derechos que tienen las personas, el derecho a tener una protección internacional”.
Destacó las redadas de migrantes y deportaciones de entre 15 y 20 vuelos por semana, incluso el padre dijo que Estados Unidos también está deportando a Guatemala migrantes de otras nacionalidades porque ya no realizan una averiguación exhaustiva de las nacionalidades, lo cual cataloga como una falta gravísima, ” un delito del gobierno norteamericano”.