Durante las quimioterapias ordinarias siempre ha sido complicado realizar los procesos del tratamiento con pacientes que padecen de cáncer cerebral mortal como lo es el glioblastoma (masa anormal de tejido en el sistema nervioso central), el cual está protegido por una barrera hematoencefálica.
Los científicos han inventado un dispositivo que es capaz de atravesar esa membrana que impide atacar al tumor cerebral. El mismo fue implantado en una persona despierta que después de unas horas pudo irse a casa sin complicaciones.
El mecanismo fue administrado por vía intravenosa, que duró cuatro minutos en abrir la barrera hematoencefálica. La apertura permitió que el fármaco que se administra en la quimioterapia tuviera una efectividad entre cuatro y seis veces mayor, debido a que ayuda a maximizar la penetración del antídoto y a alcanzar más rápido los resultados requeridos.