En el Tribunal Sexto de Sentencia Penal condenó a 27 años de prisión a cinco hombres señalados por el asesinato del expresidente del Organismo Judicial y Corte Suprema de Justicia (CSJ) José Arturo Sierra González; hecho ocurrido el 26 de enero de 2018.
La fiscalía con las evidencias demostró la participación de las cinco personas en el crimen; de esa cuenta la fiscal expuso los resultados de la investigación.
Detalles de la investigación
De acuerdo a las pesquisas, a las 12:20 horas aproximadamente del 26 de enero de 2018, el acusado Ricardo Francisco Pérez Pérez descendió de una motocicleta con un arma de fuego y lo despojó de su teléfono celular.
Además, le exigió el dinero que había retirado de la agencia bancaria ubicada en la 11 avenida y 32 calle de la zona 11 capitalina, a lo cual la víctima opuso resistencia.
Ante esa situación el sindicado accionó el arma de fuego, disparándole en varias ocasiones que le causaron heridas en la cabeza y cara con la intención de darle muerte.
los 5 sentenciados integraron una organización criminal que se dedicó al robo de cuentas habientes, sus víctimas mujeres y personas de la tercera edad, a quienes bajo amenazas de muerte les quitaban el dinero, que minutos antes retiraron de alguna agencia bancaria
Los condenados
Antonio Raúl Tocay Yumán.
Bryan Alexander Revolorio.
Jairo Christian Urizar Calel.
Ricardo Francisco Pérez Pérez y,
José Rogelio Chin Monroy.
Recuerda a su padre
En la fase final del juicio, Elsi Sierra, una de las hijas del ex presidente, judicial, José Arturo Sierra González, recordó a su padre.
Catedrático, maestro, incluso investigador incansable, comprometido con la justicia con una disciplina, como a ninguno he conocido. Ocupó cargos como Presidente de Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala, Magistrado y Presidente de la Corte de Constitucionalidad, Magistrado y Presidente de la Corte Suprema de Justicia, entre otros muchos roles. Un abuelo como ninguno, un padre, esposo, hijo comprometido. También añadió: Por lo que mi padre murió nosotras vivimos con él, Cuando aprendemos a sonreírle a la vida, como él lo hizo, nada ni nadie, puede robarnos la alegría de lo que vivimos y lo que compartimos con él, nada ni nadie, puntualizó.
Con infromación y fotografía de Hugo Morales