Los presidentes de las federaciones territoriales pidieron este lunes la dimisión de Luis Rubiales, quien está pendiente de una decisión de la justicia deportiva y contra el que la fiscalía ha abierto diligencias por un “presunto delito de agresión sexual” por el beso forzado a la jugadora. Jenni Hermoso.
Reunidos de urgencia por el presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha, los presidentes territoriales instaron a “una profunda e inminente reestructuración orgánica en cargos estratégicos de la Federación”.
Esto pone más presión sobre Rubiales, suspendido provisionalmente por la FIFA “de toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional” por un período inicial de 90 días mientras “se tramita el procedimiento disciplinario” abierto en su contra.
A esta suspensión podría unirse otra en el ámbito nacional si el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) español, acepta la denuncia presentada el viernes por el Consejo Superior de Deportes (CSD).
El secretario de Estado para el Deporte y presidente del CSD, Víctor Francos, explicó este lunes que, si el TAD abre expediente, la previsión es que “la suspensión (de Rubiales) sea ‘sine die’ hasta que el TAD resuelva jurídicamente el procedimiento”.
El CSD presentó una denuncia ante el TAD por dos “infracciones muy graves” por un posible “abuso de autoridad” y “actos que atentan a la dignidad o decoro deportivo”.
Investigación penal
Junto a la justicia deportiva, en la vía penal la fiscalía de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, ha decidido abrir diligencias por un “presunto delito de agresión sexual”, según señaló en un comunicado.
En la entrega de medallas tras ganar España la final del Mundial, Luis Rubiales dio un beso forzado en la boca a Jenni Hermoso, que suscitó un sinfín de críticas nacionales e internacionales desde todos los ámbitos de la sociedad.
“Lo sucedido no representa a la sociedad española”, afirmó este lunes el número tres del gobierno español, Yolanda Díaz.
La presidenta de la Liga femenina, Beatriz Álvarez, pidió la dimisión de todos los que aplaudieron el discurso de Rubiales negándose a dimitir en la asamblea de la RFEF