La etapa de ver crecer a los hijos es una de las más importantes y bellas para los padres, pero para Elena no fue así, ella estaba trabajando de empleada doméstica en una casa ubicada en la Ciudad Capital, resultó embarazada y cuando tuvo a su hijo se lo quitaron.
En ese momento sin tener apoyo de otra persona fue despedida y por ende tuvo que abandonar esa vivienda. Sí, pareciera el relato de una novela pero no, lastimosamente Elena lo vivió en carne propia.
Desesperada, Elena acudió ante las autoridades, interpuso una denuncia y regresó al pueblo que la vio nacer, sin embargo, el no tener un teléfono y no colocar la dirección de su residencia hizo que hasta cinco años después se diera con su paradero.
Acciones
Fue así como siguió la investigación, ahora las autoridades retomaron el caso y este miércoles allanaron el lugar donde ella vio por última vez a su hijo a quien recordaba a corta edad y que quedó bajo la ausencia de su verdadera madre.
El niño ya tiene cinco años, creció en un seno familiar donde él posiblemente cree que si son sus padres, por lo mismo tuvo que solicitarse la intervención de Procuraduría General de la Nación –PGN- y la captura de los patrones de Elena.
Aunque este niño en este tiempo estuvo en un lugar sano, con todos los recursos necesarios, paso cinco años sin ver a su progenitora.
Le vedaron este derecho de una forma ilegal y mientras que, Elena no pudo escuchar sus primeras palabras ni pudo acompañarle en sus primeros pasos. Fueron cinco años de dolor y angustia que ahora se han convertido en sed de justicia.
Con información de Karla Mejía.