Yovanny Jadiel López, el hijo de Marlén Ochoa, la joven latina que fue asesinada para sacarle el bebé de su vientre, falleció este viernes, según informó una persona cercana a la familia. El niño estaba ingresado con daño cerebral en un hospital de Chicago, Illionois, desde que llegó al hospital el mismo día que fue arrancado del vientre de su madre.
El cuerpo de Ochoa López apareció el mes pasado en un contenedor de basura detrás de la casa de una mujer que ha sido acusada del asesinato de la joven de 19 años.
Según los fiscales, Clarisa Figueroa, de 46 años, dijo ser la madre del bebé cuando lo llevó a un hospital. Ella y su hija de 24 años están acusadas de homicidio con agravantes.
Los acusados
Las autoridades han acusado de homicidio en primer grado a dos mujeres, Clarisa Figueroa, de 46 años, y a su hija de 24, Desiree Figueroa. Según la investigación, ellas atrajeron a Marlén Ochoa a su casa con engaños a través de las redes sociales. Le hicieron creer que iban a darle ropa y enseres de recién nacido, pero cuando entró en la casa la estrangularon con un cable y después le abrieron el vientre con un cuchillo.
Piotr Bobak, novio de Clarisa Figueroa, está también acusado de ocultar el homicidio. Los tres acusados deberán presentarse ante la corte nuevamente el próximo 26 de junio.
Tras el homicidio, Clarisa Figueroa fue al hospital ya que el recién nacido sufrió daño cerebral. Sin embargo, al realizar una prueba de ADN se descubrió que ella no era la madre.
La familia de la joven asesinada aún guardaba la esperanza de que el bebé pudiera sobrevivir, sobre todo después de que a finales de mayo aparentemente abriera los ojos. Sin embargo, los médicos siempre indicaron que su situación era crítica.
Durante varios días la familia estuvo buscando a Marlén Ochoa. Unas tres semanas después de su desaparición, la policía encontró el cadáver en una casa que estaba bajo investigación.