Paulatinamente, en el transcurso de la madrugada, los policías se han desplegado en distintos sectores más asediados por el crimen organizado, como Mejicanos.
Los objetivos primordiales de los agentes son acabar con las extorsiones y recuperar los espacios públicos de los lugares intervenidos con presencia policial masiva.
El plan está basado en tres ejes fundamentales: el control en centros penales, el bloqueo del financiamiento de las estructuras pandilleriles y el control territorial.