Un bombardeo ucraniano dañó este jueves un puente que une la península de Crimea con una región del sur de Ucrania parcialmente ocupada por Rusia, último movimiento de una contraofensiva que, según Kiev, “llevará tiempo”.
La península ucraniana de Crimea, anexionada por Moscú en 2014, sirve de base de retaguardia para las fuerzas rusas que participan desde hace 16 meses en la invasión de la exrepública soviética, en especial para enviar refuerzos y mantener equipos. Por eso, los pocos puentes que conectan las dos regiones son blancos esenciales para esa ofensiva
“En la noche, un ataque alcanzó el puente de Chongar”, que une Crimea a la región ucraniana de Jersón, anunció el gobernador ruso de la península, Serguéi Aksionov, agregando que el bombardeo no había provocado víctimas.
Detalles del puente
El puente se encuentra en la ruta más directa entre Crimea y Melitópol, ciudad tomada por Rusia y situada en el sur de Ucrania, uno de los teatros de la contraofensiva lanzado hace unas semanas.
Según la administración rusa de la parte ocupada en la región de Jersón, las fuerzas ucranianas usaron misiles británicos Storm Shadows de largo alcance para destruir el puente, una obtenida que no pudo ser verificada de forma independiente.
Las fuerzas ucranianas “buscan intimidar a los habitantes de Jersón, sembrar el pánico entre la población”, dijo el jefe de la administración rusa, asegurando que la estructura estará reparada en “pocos días”.
Reacciones
Un miembro de la administración ucraniana en Jersón, Yuri Sobolevsky, aseguró que el daño infligido al puente de Chongar era de “gran importancia”, ya que se trata de “un golpe a la logística militar de los ocupantes”.
Crimea es blanco frecuente de ataques ucranianos, en particular de drones. En octubre de 2022, una gran explosión dañó gravemente el único puente que conecta directamente Crimea a Rusia.