La sesión solemne programada para este jueves inició después de las 11:30 horas. Después de declararla abierta, los congresistas entonaron el himno nacional, para continuar con la lectura del acuerdo y la juramentación de la Junta Directiva para el período 2021-2022.
El presidente, los tres vicepresidentes y cinco secretarios prestaron el juramento a ser fieles y velar por el cumplimiento de la Constitución Política de la República de Guatemala.
Posterior a prestar juramento procedieron a la firma en el Libro de Oro del Congreso, acto con el que inauguran de manera oficial la apertura del período ordinario de sesiones para el 2021.
Llamado a la unidad en el Congreso
Allan Rodríguez, que fue reelecto presidente por segundo año consecutivo, basó su discurso en la unidad que debe existir en el Congreso, para que no haya banderas políticas sino el compromiso de buscar el bienestar de la población. También hizo el llamado a fomentar valores como la tolerancia, la cultura de paz y evitar a quienes amenazan la unidad.
Retomo las sabias palabras del papa Francisco de que no hay paz sin la cultura de cuidado de bien común. Hace falta caminos de paz que lleven a cicatrizar las heridas, nos decía que hoy más que nunca se necesita de artesanos de paz y por esto hago votos que por encima de las diferencias políticas en este Congreso es posible contar con 160 artesanos de la paz, solidaridad, tolerancia y trabajo por una Guatemala mejor”.
Rodríguez reafirmó su compromiso para que en el 2021 se cuente con los consensos para impulsar una agenda con enfoque en la salud, una agenda social y de protección apoyo a la reconstrucción, y de fortalecimiento al sector justicia.
Contagio del odio
Se refirió al tema del odio, especialmente por personajes que “han querido sembrar odio, desinformación y discordia principalmente valiéndose de las redes sociales, malos hijos de la patria han querido usar la tecnología para dividirnos”.
Además envió un mensaje puntual a la población para evitar contagiarse de conductas negativas como el odio e intolerancia que solo afectan al país.
Está en nuestras manos llevar a todo el territorio la vacuna de la fe, paz, amor al prójimo. Afortunadamente esta no se produce en grandes fábricas, esa se produce dentro de nosotros mismos, desde el corazón y está en nuestras manos el quererla compartir con nuestro prójimo, evitemos entonces pues el contagio del odio y la intolerancia y en cambio hagamos posible que en nuestro país haya un enorme contagio de la fe, paz y amor”.
El acuerdo de la Junta Directiva fue aprobado con 116 votos y le corresponde el proyecto de acuerdo aprobado 2-2021 que será publicado en el Diario Oficial.