Argentina derrotó a Italia en la Finalissima, el torneo que reunió al campeón de la Copa América y a la campeona de Europa.
En un juego ampliamente dominado por la albiceleste, la Argentina de Leo Messi derrotó a la Italia de Mancini. El encuentro no acabó en goleada gracias, en parte, a Gianluigi Donnarumma, el guardián italiano que protagonizó grandes atajadas.
La albiceleste se llevó la Finalissima por marcador de 0-3 (goles de Lautaro Martínez, Ángel Di María y Paulo Dybala).
La Finalissima, conocida también como la Copa de Campeones Conmebol-UEFA, era un torneo que no se jugaba desde 1993. En aquella ocasión se jugó por última vez la copa de campeones Sudamérica-Europa. Argentina le ganó por penales a Dinamarca y se quedó con la Artemio Franchi. En ese año, Diego Armando Maradona brillaba con la albiceleste.
La Scaloneta, imparable
De la mano de Lionel Scaloni, Argentina lleva 32 partidos consecutivos sin derrota. Se trata de la mejor racha invicta vigente en el fútbol de selecciones.