Un tribunal alemán declaró culpables el jueves a dos exempleados del fabricante de armas Heckler & Koch por su participación en el suministro de armas que terminaron en zonas conflictivas de México, y exigió el decomiso de las ganancias por su venta por un total de aproximadamente 3,7 millones de euros (4,2 millones de dólares).
La corte estatal de Stuttgart condenó a un exgerente de ventas por exportar armas con permisos obtenidos fraudulentamente y a un exsecretario por complicidad. Recibieron sentencias suspendidas de 22 y 17 meses, respectivamente. Otros tres acusados _dos exgerentes responsables de exportación y un subgerente de ventas_ fueron absueltos.
La corte dijo que la compañía entregó 4.219 fusiles semiautomáticos, dos metralletas y 1.759 barriletes a México, que fueron vendidos en los estados de Jalisco, Chiapas, Chihuahua y Guerrero. Las exportaciones se llevaron a cabo entre 2006 y 2009.
El tribunal encontró que las exportaciones a México en sí fueron cubiertas con permisos del gobierno alemán, pero que fueron obtenidos fraudulentamente gracias a información incorrecta de la cual se tenía conocimiento basada en declaraciones poco fiables de las autoridades mexicanas sobre el destino de las armas.
Grupos defensores de derechos humanos dicen que las armas entregadas en México con frecuencia terminan en las manos de los cárteles de narcotráfico.