El 5 de septiembre de 1983, durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América, celebrado en Tiahuanacu, Bolivia, se decidió conmemorar a la mujer indígena a nivel internacional, con la finalidad de centrar la atención en las mujeres indígenas cuya historia en muchas situaciones está inmersa en condiciones desiguales como maltrato y discriminación, entre otros flagelos.
Esta fecha fue designada como homenaje a Bartolina Sisa, dirigente indígena Aymara de nacionalidad bolivariana, originaria del departamento de La Paz, quien fue asesinada el 5 de septiembre de 1782 tras liderar una sublevación indígena contra la corona española.
Bartolina Sisa, asesinada el 5 de septiembre de 1782 tras liderar una sublevación indígena contra la corona española
Asi mismo, hay que destacar que la mujer es un pilar indispensable en la historia y en nuestra sociedad, ya que debemos reconocer sus aportes tanto culturales, históricos y sociales, entre otros.
La mujer indígena cuenta con características únicas como es reconocer su valentía en conservar la cultura de sus pueblos y defender sus derechos. Cabe destacar que en Guatemala la mujer indígena más destacada por sus logros es Rigoberta Menchú, quien ostenta el Premio Nobel de la Paz otorgado en 1992.
Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz 1992 (foto: Wikipedia)