Estados Unidos ha detectado por lo menos 4 mil casos de adultos que llevan niños, haciéndolos pasar como sus hijos. El ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, invitó al vecino país de México a unirse a los esfuerzos por frenar el flujo de migración ilegal hacia Estados Unidos, un fenómeno que se convirtió en crisis desde octubre pasado, cuando se iniciaron las caravanas de migrantes.
“Es importante que, como región, estemos conscientes de que un solo país no puede resolver esta problemática, pues involucra a seres humanos”, dijo el funcionario, en la reciente reunión que los ministros de Seguridad de los países del Triángulo Norte sostuvieron con el secretario Nacional de Seguridad de EE. UU., Kevin McAleenan.
En esa oportunidad, McAleenan habló sobre la trascendencia de poner fin al éxodo, el cual se pone en riesgo la integridad no solo de adultos, sino también de niños, quienes emprender el viaje creyendo que podrán internarse en territorio norteamericano.
Se han detectado por lo menos 4 mil casos de fraude, en los que adultos llevan a pequeños y los hacen pasar como sus hijos, como mecanismo para facilitar su acceso a aquel país, manifestó McAleenan, e hizo énfasis en que esta práctica no garantiza el ingreso a EE.UU.
Las autoridades buscan fortalecer el intercambio de información para desarticular las estructuras que lucran con el traslado de migrantes, entre otras acciones para impedir que la población deje sus países de origen, en busca del llamado sueño americano.