Milicianos del grupo Estado Islámico atacaron una fiesta de ramadán organizada por un exfuncionario de un grupo respaldado por Estados Unidos en el este de Siria, con un saldo de siete muertos y cuatro heridos, dijeron activistas de oposición el jueves.
El grupo Estado Islámico se declaró responsable del ataque del miércoles por la noche en la zona de Abu Khashab, provincia de Deir el-Zour. El blanco del ataque fue el hogar de un exvocero de las Fuerzas Democráticas Sirias, según el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos con sede en Gran Bretaña y el sitio web del medio noticioso Euphrates Post.
Los milicianos arribaron en motocicletas y abrieron fuego cuando el grupo se encontró en un iftar, la comida que puso fin al ayuno durante el mes sagrado de ramadán, en la casa del exvocero de las FDS Nouri Hameesh, uno de los muertos.
Tres años después de que el grupo extremista suní Estado Islámico perdió su último retazo de territorio en Siria, sus células han incrementado sus ataques en los últimos meses, principalmente contra las FDS comandadas por kurdos, pero también contra las fuerzas del gobierno sirio.
El llamado califato del grupo llegó a abarcar en su apogeo un tercio de Irak y Siria. La guerra contra el grupo apareció varios años, mató a miles y dejó grandes territorios de ambos países en ruinas.