El aumento del flujo migrante de Guatemala hacia Estados Unidos, es analizado con diferentes enfoques. Durante la primera jornada de la Reunión del Undécimo Período del Grupo de Trabajo sobre la Trata de Personas, impulsada por la Organización de las Naciones Unidas, la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes del Ministerio Público (MP), abordó dos temas:
-El Análisis de las repercusiones de la disponibilidad de cauces regulares de migración en la reducción de la demanda de tráfico ilícito de migrantes.
-Cómo fortalecer la capacidad para enjuiciar los casos de tráfico ilícito de migrantes.
Durante la actividad virtual se conversó sobre los efectos en el tráfico ilícito de migrantes durante la pandemia del COVID-19, las restricciones conexas de la circulación y la menor disponibilidad de canales regulares de migración”, detallaron en un comunicado.
Buscan fortalecer estrategias
Además, se dialogó sobre qué medidas se pueden implementar para el desarrollo y el fortalecimiento de estrategias especializadas para el enjuiciamiento del tráfico ilícito de migrantes.
En Guatemala, constituye delito de trata de personas la captación, el transporte, traslado, retención, acogida o recepción de una o más personas con fines de explotación.
Quien cometa este delito será sancionado con prisión de ocho a dieciocho años y multa de trescientos mil a quinientos mil Quetzales”, indicó el MP.
Durante ambos segmentos abordados ante la ONU, la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes dio a conocer el trabajo que efectuado por Guatemala en la persecución y sanción del delito.
También se reiteró la importancia de la cooperación internacional y de las alianzas regionales para el intercambio de información, así como en la recopilación de pruebas lo cual generará investigaciones proactivas.
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