La esposa del príncipe Harry redactó la misiva con el fin de concienciar sobre la situación que atraviesan miles de ciudadanos en el país norteamericano.
Meghan Markle lo ha vuelto a hacer. La actriz, convertida en duquesa, envió una carta abierta al Senado de Estados Unidos para reclamar una legislación que proteja a las familias y otorgue mayores permisos remunerados de paternidad y maternidad.
La esposa del príncipe Harry redactó la misiva con el fin de concienciar sobre la situación que atraviesan miles de ciudadanos estadounidenses. De esta forma, se ha animado a recordar sus orígenes humildes, cuando en la entrada a su adolescencia comenzó a hilar una serie de trabajos precarios, recoge ABC.
“Comencé a trabajar en la tienda de yogur congelado local a la edad de 13 años. Serví mesas, cuidé niños y trabajé por turnos para cubrir gastos. Trabajé toda mi vida y ahorré cuando y donde pude, pero incluso eso era un lujo, porque por lo general se trataba de llegar a fin de mes y tener lo suficiente para pagar el alquiler y poner gasolina en mi automóvil“, rezan las primeras líneas del texto.
“Me crie comiendo ensaladas a cinco dólares y sabía que era una afortunada por lo duro que trabajaban mis padres para mí”, apuntó Markle, afirmando que “la madre o el padre que trabaja se enfrenta al conflicto de estar presente en la vida de su hijo o recibir un pago”.
La actriz valora que “son 20 o 30 años, incluso más, décadas de dedicar tiempo, cuerpo y energía sin fin, no solo a la búsqueda del sueño americano, sino simplemente al sueño de la estabilidad”.
Por ello, reconoce que se siente feliz y tranquila por poder dedicar tiempo a su familia sin pasar por demasiadas preocupaciones. Sin embargo, cree que todas las familias tendrían que disfrutar de los mismos privilegios.
“En junio, mi marido y yo dimos la bienvenida a nuestro segundo hijo. Como cualquier padre, estábamos contentos. Como muchos padres, estábamos abrumados. Como pocos padres, no nos enfrentamos a la dura realidad de pasar esos primeros meses críticos con el bebé o de volver al trabajo”, escribió Markle al respecto.
“Sabíamos que podíamos llevarla a casa y, en esa etapa vital (y sagrada), dedicarlo todo a nuestros hijos y a nuestra familia. Sabíamos que al hacerlo no tendríamos que tomar decisiones imposibles sobre el cuidado de los niños, el trabajo y la atención médica que tantas personas tienen que tomar todos los días. Ninguna familia debería enfrentarse a estas decisiones. Ninguna familia debería tener que elegir entre ganarse la vida y tener la libertad de cuidar de su hijo”, se lee en la misiva.
La intérprete subraya que “muchos otros países tienen programas sólidos que brindan meses de tiempo para que ambos padres (biológicos o adoptivos) estén en casa con sus hijos”. No obstante, esto no ocurre en Estados Unidos: “No garantiza federalmente a ninguna persona un solo día de licencia pagada. Si vamos a seguir siendo excepcionales, no podemos ser la excepción”.
“En nombre de mi familia, Archie y Lili y Harry, les agradezco por considerar esta carta, y en nombre de todas las familias, les pido que se aseguren de que este momento trascendental no se pierda”, cerró la duquesa.
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